Un análisis de miles de datos procedentes de múltiples variables para obtener un mayor conocimiento sobre los suicidios en Andalucía
La OMS define el suicidio como “el acto intencional de causarse una lesión mortal a uno mismo”. Destaca la importancia de prevenir el suicidio mediante la identificación temprana de los factores de riesgo junto con el tratamiento oportuno de los trastornos mentales y emocionales subyacentes.
La analítica e inteligencia de datos, las herramientas digitales y las soluciones basadas en DATA e IA deben ser nuevos elementos disruptivos e innovadores de una secuencia (Predecir, Prevenir, Proteger) conformada por diversos profesionales. El presente informe ‘Suicidios en Andalucía’ se ha realizado usando técnicas de análisis de datos humanos con aprendizaje y minería mecánica, identificando tendencias, anomalías y patrones que podrían ser utilizados para mejorar la toma de decisiones.
Tal y como expresa el autor, el analista de inteligencia de datos Nicolás Rodríguez, “analizar e investigar problemas humanos y sociales a través de los datos ofrecerá nuevas oportunidades de conocimiento externo e independiente, sin duda tan útil como necesario cuando se trata de proponer soluciones diferentes”.
Por tanto, este informe pretende, por un lado, servir de ayuda a las diferentes administraciones, agentes sociales y organismos dedicados a medidas y políticas públicas para minimizar el impacto del problema del suicido y, por otro lado, facilitar una extensa recopilación de múltiples datos heterogéneos sobre distintas variables convertidos en información comprensible, útil, veraz y objetiva que pueda ser entendida por el conjunto de la sociedad.
Datos sobre los suicidios
El informe inicia su análisis en 1860 rastreando los datos que aporta el Fondo Documental del Instituto Nacional de Estadística (INE). Entre las consideraciones significativas acaecidas en los primeros 100 años de estudio se encuentran aspectos como el siguiente: en el año 1860 el impacto de Andalucía en el total suicidios España era del 22,1% mientras que en el año 1961 el impacto de Andalucía creció hasta el 25,4% sobre el total suicidios España. A partir de esa fecha, exceptuando una disminución en la década de los 70 del siglo pasado, la tendencia de suicidios en Andalucía no ha hecho más que aumentar hasta alcanzar la cifra de 849 en el año 2021, la más alta de toda la serie histórica.
De entre los datos analizados del siglo XXI (2000-2021) destacan:
- Andalucía es la región de toda España en la que cada año se produce el mayor número de muertes por suicidio.
- De cada 1.000 suicidios ocurridos en Andalucía, 774 eran hombres y 226 eran mujeres.
- Durante los últimos 21 años cada día se han producido, de media, 2 suicidios en Andalucía.
- En los últimos 21 años se superaron los 800 suicidios en tres años: 2021 (849), 2013 (808) y 2008 (823)
Para abordar esta preocupante realidad el informe ofrece una completa batería de datos sobre el suicidio que incluye, entre otros aspectos, la diferenciación por sexos, por provincias, por tipo de municipios, por tramos de edad, por lugares en los que suceden, por meses del año con mayor incidencia, por las “causas de mortalidad externa”, etc., así como tablas comparativas con los datos de España y Andalucía en distintas etapas temporales.
También incluye un capítulo dedicado a evaluar los efectos de la pandemia COVID-19 y así poder valorar su impacto desde un prisma de análisis de datos. Para ello se compara el periodo actual 2020-2021 con el periodo anterior 2018-2019 donde se incluye, además, un apartado específico posterior con algunos datos provisionales del año 2022 (enero a junio) que ya han sido publicados.
Dado que los suicidios en general podrían estar relacionados con distintas variables humanas, el autor ha considerado oportuno incluir en el estudio distintos datos relativos a diversos problemas humanos comparando diferentes periodos de tiempo. De esta forma, se presentan datos sobre trastornos mentales, problemas psicológicos, consumo de fármacos, víctimas de agresiones sexuales, víctimas de violencia de género, paro, acoso escolar y personas mayores, entre otros.
Continuando con la analítica de datos y predicción de riesgos, el informe incluye una sección titulada ‘Creación de perfiles en Andalucía’ donde se evalúa y valora, tanto a los activos de riesgo como a las amenazas. Y partiendo del análisis de estructuras demográficas se definen ítems de alerta en grupos y nodos según población diana o de interés; así como otra dedicada a las variables de riesgo, que puede ser de gran utilidad tanto para los decisores públicos como para los profesionales de la atención social y la salud.
Finaliza el informe con un apartado dedicado a ‘Propuestas y Recomendaciones’ en el que el autor señala que “estos contenidos deben considerarse como un nuevo paso con un nuevo enfoque ante distintos problemas humanos y sociales en los que mediante el uso de la analítica e inteligencia de datos se persiguen unos objetivos: saber qué tenemos, conocer qué esperamos y prever qué necesitamos”. Por tanto, “en ningún caso se considera como un Proyecto o un Plan sobre Suicidios con un resultado final, al contrario, es solo el principio a una serie de propuestas humanas, profesionales, digitales y tecnológicas ante un problema con 30.000 muertes en Andalucía durante los últimos 50 años”.