Esta obra aborda la construcción de la imagen del área metropolitana de Bilbao a través de los documentales cinematográficos, desde el primero realizado en 1897 hasta la inauguración del museo Guggenheim en 1997.
Por un lado, el libro es una historia de la producción de cine documental en Bilbao y sobre Bilbao, incluyendo el descubrimiento de bastantes películas que se creían desaparecidas o habían caído en el olvido y desmintiendo muchos tópicos sobre la relación entre la villa y el cine, que habían sido divulgados por la bibliografía cinematográfica. Por otro, en estas páginas se explica cómo el cine documental ha contribuido a forjar una determinada imagen (o imágenes, incluso no-imágenes) de Bilbao y qué impacto tuvo esa producción en los espectadores.