Las radiaciones ionizantes no son inocuas. Trabajar en radiodiagnóstico puede resultar peligroso tanto para el profesional como para el paciente y el público en general. Así lo demuestra la historia de la radiología. Los conocimientos en física de la radiología y la radiobiología, la normativa legal vigente y los progresivos avances técnicos permiten minimizar los efectos lesivos de las radiaciones hasta el punto de asegurar que las exploraciones radiológicas no dañen el estado de salud más de lo que lo hiciera el desempeño de cualquier otra actividad. La asunción de este contenido resulta, pues, imprescindible y de obligado cumplimiento. El texto está homologado por el Consejo Nuclear de España, máxima entidad reguladora en la materia. Aunque buena parte de estas lecciones es aplicable al radiodiagnóstico general, la diversidad y especificidad del radiodiagnóstico dental, de creciente uso, hacen necesario un estudio particularmente dedicado a este aspecto, de modo que la obra resulta plenamente indicada para odontólogos e higienistas dentales.