La influencia de los rodajes cinematográficos o televisivos en el interés turístico de determinados destinos ha ido tomando fuerza en los últimos años.
En este libro analizamos el caso del rodaje de una superproducción internacional como es Juego de tronos en localizaciones de Irlanda del Norte o Girona, entre otras, examinando su repercusión en clave turística y los modos en que se entrelazan los atractivos preexistentes con la ficción creada por la productora HBO a partir de los libros de George R. R. Martin. Desde la especificidad del uso turístico de una de las series más exitosas de los últimos años podemos extrapolar diferentes reflexiones relacionadas con fenómenos como la construcción de cánones culturales i de imaginarios, o la noción de autoría en una contemporaneidad en la cual las expectativas del público ganan terreno.