Las elecciones europeas de 2009, celebradas simultáneamente por primera vez en 27 países, no solo representaron la primera convocatoria para el cuerpo de votantes más grande de la historia electoral de las democracias representativas contemporáneas (500 millones), sino que se convirtieron en un plebiscito a nivel europeo respecto al devenir de la propia UE. Por ello, y por el contexto de crisis económica que acrecentaba el deterioro del apoyo de los ciudadanos hacia las instituciones europeas, estas elecciones alcanzaron la máxima relevancia en el contexto europeo.
El presente título tiene como objetivo fundamental entender el comportamiento electoral de los españoles en estas convocatorias europeas, del que se derivan preguntas como "¿qué son las elecciones europeas?", "¿qué singularidades tienen y qué novedades ha supuesto en este patrón la convocatoria de 2009?", "¿en qué se parecen y en qué se diferencian las elecciones europeas de las elecciones generales?" o bien "¿cómo influyen estas diferencias en la manera cómo los ciudadanos las ven y en los criterios que utilizan para posicionarse ante ellas?".