¿Ángela de Foligno un tema de interés en el siglo XXI? Muchos de nosotros tenemos familias, hipotecas, trabajos, hijos que educar, personas que necesitan de nuestro cuidados y una variedad de otras responsabilidades. Entrar en monasterios, vivir como ermitaños y adoptar la pobreza voluntaria no son opciones reales para la mayoría de nosotros.
¿Cómo encontramos esa chispa, esa tierra del alma, esa luz interior, esa Presencia Divina en nuestras almas?
La visión que Ángela nos describe es su vivencia interior y no está en ningún lugar y el sendero que nos lleva hasta él no tiene ningún signo que nos señale la dirección: ¡Entra aquí!
La visión que nos relata Ángela es la interioridad que se convierte en un signo de Dios. Entrar en la interioridad y descubrir su vinculación con la exterioridad de nuestra propia existencia nos sitúa en otra dimensión desde la que podemos divisara nuestra identidad, el mundo y el prójimo, etc., como si los conociéramos por primera vez.